domingo, 30 de diciembre de 2012

Los Reyes Magos no fueron tres





Mucho se ha especulado sobre los famosos Reyes Magos aunque en realidad existe muy poca documentación que se sustente cuántos fueron, quiénes o de donde provenían. La única referencia que encontramos es en el Evangelio de Mateo y tampoco nos aporta muchos datos: " Nacido, pues, Jesús en Belén de Judá en los días del rey Herodes, llegaron de Oriente a Jerusalén unos magos diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer?"

Curiosamente en un cuento navideño escrito en 1896 por Henry Van Dyke  se habla de un cuarto Rey Mago llamado  Artabán con una desafortunada historia a sus espaldas. Al parecer una serie de desdichas hicieron que nuestro cuarto Rey Mago no llegara a tiempo al punto de encuentro  desde el que partirían todos los Reyes hacia Belén. ¿El motivo de su tardanza? Según relatan en el cuento, Artabán, que portaba como ofrenda a Jesús un diamante protector de la isla de Méroe, un espectacular rubí de las Sirtes y un trozo de jaspe de la isla de Chipre, se encontró en su camino con un viejo moribundo al que unos ladrones habían apaleado. El Rey Mago interrumpió su viaje para atender al viejo herido y le entregó el diamante que guardaba para que no tuviera problemas económicos el resto de su vida. Desolado por no encontrar a sus compañeros de camino, continuó él solo hacia Judea. De nuevo se detuvo al observar cómo unos soldados de Herodes degollaban a varios niños recién  nacidos. Artabán ofreció a uno de aquellos guardias el rubí a cambio de la vida de uno de los pequeños que iban a asesinar pero su actitud sólo le sirvió para ser apresado y encerrado en el palacio de Jerusalén.

Tras treinta años de cautiverio y mientras vagaba por las calles de Jerusalén escuchó que al Mesías lo iban a crucificar. El cuarto Rey Mago se encaminó a adorar a su Señor pero en el camino reparó en que la hija de un comerciante iba a ser subastada para pagar las deudas de su padre. Artabán ofreció a cambio de la venta su último presente: un trozo de jade.

Pero finalmente todas sus desgracias fueron recompensadas y tras la resurrección de Jesucristo se cuenta que éste se le apareció entre sueños y le dijo " Tuve hambre y me diste de comer, tuve sed y me diste de beber, estuve desnudo y me vestiste, estuve enfermo y me curaste, me hicieron prisionero y me liberaste". 

Artabán preguntó al Señor en qué momento había realizado esos actos y Jesús le contesto: " Lo que hiciste por tus hermanos, lo hiciste por mí".

viernes, 28 de diciembre de 2012

Origen del día de los Inocentes


Hoy es el día en el que muchos vamos a sufrir alguna broma o " inocentada" pero sabemos de ¿Dónde viene esta tradición? Para encontrar su origen, tenemos que remontarnos a comienzos de nuestra era, cuando el rey Herodes ordenó matar a todos los niños menores de dos años en la ciudad de Belén, temeroso de que Jesús, el nuevo mesías que acababa de nacer, le pudiese arrebatar el trono. A raíz de esta matanza, la iglesia católica decidió, allá por el siglo IV, conmemorar la muerte de estos niños, los Santos Inocentes, cada 28 de diciembre.


Sin embargo, con el paso del tiempo esta fecha acabó adquiriendo el carácter de día de las bromas que conocemos en la actualidad. Podemos hallar antecedentes de ellas en la antigua fiesta romana de los saturnales (el 17 de diciembre), pero el verdadero origen de las inocentadas se remonta a la Edad Media. En el centro de Europa existía la costumbre de elegir, el día de San Nicolás (6 de diciembre), un Obispillo, seleccionado entre los niños del coro de las catedrales, y cuya dignidad duraba hasta el 28 de diciembre, día de "Los Inocentes". Por esta razón, y porque era heredero de otra figura popular anterior, la del "Obispo de los locos" (que representaba el inversión de los órdenes sociales y, por tanto le era permitido toda forma de bromas) tomó el nombre de "Obispillo de Inocentes". 

Perseguida por la Iglesia por su carácter burlesco y sacrílego (1431, Concilio de Basilea), la costumbre continuó y se difundió a otros países como España, en donde adquirió gran arraigo. Cuando Sicilia estuvo bajo el dominio de España, con los españoles llegaron las inocentadas y, del mismo modo se trasladaron a América Latina dónde aún perduran. 

En Sicilia la costumbre estaba circunscrita a las clases próceres. Y ya después de 1860 las inocentadas cedieron el paso a la bromas del "pez de Abril", como consecuencia del influjo cultural de la península italiana (esta fiesta tiene lugar el 1 de abril en Italia y Francia, siendo el equivalente a nuestro día de los inocentes). 

En Burgos (España), todavía se celebra la tradición del Obispillo y sus 16 Inocentes, quien después de su investidura a primeras horas del día 28 de diciembre, recorre las calles por el Casco Histórico, finalizando su caminata a lomos de un caballo en la Plaza Mayor, donde es recibido por al Alcalde y otras autoridades. Desde el palco del Ayuntamiento saludará a todos los presentes, sobre todo a los niños burgaleses.

Fuente: mitos urbanos

martes, 25 de diciembre de 2012

La verdadera Historia de Papá Noel



Cuenta la historia que Nicolás de Bari nació en el siglo IV en Patara, una ciudad del distrito de Licia, en lo que actualmente es Turquía, dentro de una familia rica y acomodada. Desde su niñez, Nicolás destacó por su bondad y generosidad con los más pobres, preocupándose siempre por el bien de los demás. Siendo todavía muy joven, el muchacho perdió a sus padres, presas de una epidemia de peste, y se convirtió en el heredero de una gran fortuna. A sus 19 años, Nicolás decidió dar toda su riqueza a los más necesitados y marcharse a Mira con su tío para dedicarse al sacerdocio.
Además fue nombrado Patrono de los marineros porque, cuenta una historia que, estando alguno de ellos en medio de una terrible tempestad en alta mar y viéndose perdidos, comenzaron a rezar y a pedir a Dios la ayuda del santo, y las aguas se calmaron.Allí fue nombrado obispo y se convirtió en santo patrón de Turquía, Grecia y Rusia.

San Nicolás falleció el 6 de diciembre del año 345. Puesto que esa fecha está muy próxima a la Navidad, se decidió que este santo era la figura perfecta para repartir regalos y golosinas a los niños el Día de Navidad.
Desde el siglo VI, se empezaron a construir templos en su honor y en 1087 sus restos fueron llevados a Bari, en Italia.
Posteriormente, en el siglo XII, la tradición católica de San Nicolás creció por Europa, y hacia el siglo XVII emigrantes holandeses llevaron la costumbre a Estados Unidos, donde se suele dejar galletas o pasteles caseros y un vaso de leche a Santa Claus.
Por cierto, como curiosidad, el nombre Santa Claus se creó a raíz del nombre del santo en alemán, San Nikolaus.
El aspecto de San Nicolás de Bari era muy distinto al que se le atribuye hoy: tenía la complexión delgada y era de gran estatura. Y el hecho de que lo representen siempre con una bolsa y tenga la fama de repartidor de regalos se debe a que, en cierta ocasión, el santo tuvo conocimiento de que la hija de uno de sus vecinos iba a casarse y su padre no tenía dinero para la dote, por lo que decidió entregarle una bolsa con monedas de oro. Así, la boda pudo celebrarse y, desde entonces, cobró fuerza la costumbre de intercambiar regalos en Navidad.

 Fuente: guía infantil.com


lunes, 24 de diciembre de 2012

Los malos de la Historia: El Imperio Bizantino

Buenos días, hoy saltamos al Imperio Bizantino, repasaremos aquellos "angelitos" que pasaron por este periodo.

Los emperadores bizantinos, han pasado a la historia por la crueldad de los castigos que imponían. Según las leyes imperantes en ese momento, si alguien intentaba atentar contra el emperador atentaba de manera directa contra Dios y se le aplicaba un tremendo castigo para conseguir que reconociera su culpabilidad y sus posibles cómplices.

Las torturas o las ejecuciones se inflingían en el hipódromo (algo similar al circo romano) y cada emperador elegía su método preferido.

Por ejemplo:

Miguel III, apodado el Beodo


Gobernó desde el año 842 hasta su muerte en el año 867, mutilaba a los torturados y más tarde los quemaba públicamente con azufre para que el resto de su vida lo pasaran mendigando con el cuerpo marcado.

Basilio I el Macedonio ( 867-886)


Era partidario de dejar a los castigados mancos y tuertos. 

León VI, el Sabio (886-912)


A pesar de ser llamado el Sabio, prefería empalarlos o quemarlos, dependiendo de cómo se encontrara de ánimo ese día, eso sí, casi siempre la familia y los hijos del condenado iban incluidos en la penitencia.

En la siguiente entrada, hablaremos de personajes tan ilustres como Gilles de Rais, Torquemada o Vlad Tepes, entre otros.




viernes, 21 de diciembre de 2012

El Juicio final... en pelotas


         Roma. 24 de diciembre de 1541:


Fue la fecha en que Miguel Ángel  descubrió  El Juicio Final, pintado en la pared del altar de la Capilla Sixtina, lo más suave que se oyó es "a este tipo se le ha ido la cabeza". Todos los protagonistas del Antiguo y Nuevo Testamento estaban desnudos y con todas sus "cositas" puestas. 

Gestos crispados, escenas caóticas, miedo, espanto... Si eso era lo que le esperaba a un cristiano, mejor hacerse musulmán.

El juicio final era un festival de testículos, culos y posturas obscenas, y esto, en la Roma del s.XVI, dejó a algún cardenal infartado. Dónde había quedado aquella armonía de las figuras que Miguel Ángel había pintado veinte años antes en la bóveda de la Capilla Sixtina. Pues se había quedado en el camino.

Miguel Ángel era ya muy  mayor, más pesimista, estaba de vuelta de todo, había tratado hasta con diez papas distintos y volcó todo su genio en aquel fresco convulso y caótico. Porque Miguel Ángel iba con su propio camino, y quien lo contratara ya sabía a lo que se exponía.

En el juicio final Miguel Ángel dio la vuelta a los cánones establecidos. Los ángeles carecen de alas, los apóstoles tienen cara de mala leche, las matriarcas de Israel están con los pechos fuera y Jesucristo, sin barba  y muy joven, hace un gesto en el Vaticano.

A Miguel Ángel casi se lo comen, pero le dio igual. Es  más, a todo aquel que le atacó mientras pintaba, lo plantó en su obra con una postura comprometida: el rostro de un alto cargo de la curia vaticana lo puso representado a Minos, el juez del averno, con una serpiente mordiéndole el pene. De lo que no se libró Miguel Ángel, aunque al menos no llegó a verlo, fue de que el Vaticano ordenara a un pintor tapar culos y genitales con trapitos  y calzones. El repintador pasó a la historia como Il Braghettone. 

lunes, 17 de diciembre de 2012

Los Malos de la Historia: Atila el azote de Dios.


Buenos días, esta semana, que quizás sea la del fin del mundo... vamos a hablar de Atila. el azote de Dios.



Con este terrible sobrenombre es como se conoce al último caudillo de los hunos. Atila (aproximadamente 403-453) fue uno de los peores enemigos del Imperio romano, pues unificó todas las tribus bárbaras con el objetivo de doblegar a sus enemigos del otro lado del Danubio.

De la época de Atila no existen muchos testimonios escritos por lo que los historiadores creen que  muchas de las historias que conocemos son leyenda inventadas para desprestigiarlos, como la que en su momento escribió de él un historiador griego llamado Priscus: 

 ”Fue un hombre que nació para sacudir las razas del mundo, un terror para todas las tierras que de una forma u otra atemorizó a todos por las noticias terribles propagadas sobre él. Era altanero en su corte, orgulloso, lanzaba miradas a todos lados para que su poder fuese evidente, incluso en los movimientos de su cuerpo.Amante de la guerra, era reservado en sus acciones, dado a recibir consejos, amable con sus súbditos y generoso con aquellos a quienes había otorgado su confianza. Era bajo de estatura, con un pecho ancho, cabeza masiva y ojos pequeños, tenía poca barba, su nariz era chata y su tez morena, mostrando así los signos de su raza".

Lo cierto es que los romanos lo temían porque consiguió que sus  hombres fueran invencibles en la batalla y que a su paso arrasaran todo lo que encontraban, de ahí las frases " Bajo los cascos de su caballo nunca más crece la hierba" y " No hay más sangre derramada que por la espada del rey Atila". Los enemigos no consideraban a los hunos "humanos", más bien era para ellos la reencarnación del demonio. Se decía que no cocinaban la carne y que prácticamente vivían sobre sus caballos. No tenían casas, no utilizaban ropa limpia, apenas se aseaban y eran aterradores. Llegaban al campo de batalla cabalgando a toda velocidad pegados a sus bestias y portando arcos y flechas que utilizaban con total maestría por lo que causaban el terror de sus adversarios rápidamente. 

Su fama de crueles fue su  mejor tarjeta de visita y los romanos no dejaban de negociar con el rey de los hunos, cambiando la paz por oro y riquezas. Roma se convirtió en el  mejor suministrador de bienes de Atila, que con sus hombres llegó a la puerta de Roma.

El propio León I tuvo que negociar con el bárbaro la paz a cambio de carromatos repletos de riquezas, pero en el camino habían muerto miles y miles de hombres de los dos bandos.

Finalmente, cuando sus riquezas y su poder eran incuestionables, regresó a su tierra y comenzó a preparar una fastuosa boda con una hermosa joven germánica de la que se había encaprichado.

Atila se casó con la bella joven cuando tenía 50 años y lo celebró con un gran banquete, plagado de invitados, donde la comida y la bebida se sirvieron en grandes cantidades durante toda la noche.

Misteriosamente, el rey de los hunos apareció muerto en su cama al día siguiente. Algunos relatos aseguran que después de comer y beber sin mesura tuvo una hemorragia nasal y que se ahogó en su propia sangre. Otros, en cambio, hablan de envenenamiento por parte de su joven esposa para vengarse del asesinato de su familia a manos de los bárbaros. Lo cierto es que a su muerte su ejército se quedó consternado y como pensaban que el más grande guerrero de todos los tiempos no debía ser ofrendado con lágrimas de mujer sino con sangre de guerreros se cortaron el pelo y se hirieron entre ellos con las espadas. Era su forma de adorar al más valeroso y cruel bárbaro que ha dado la historia.

lunes, 10 de diciembre de 2012

Los malos de la Historia: Cómodo




Lucio Aurelio Cómodo Antonino  (161-192 d.C) gobernó el Imperio romano desde el año 177 hasta su muerte al sustituir a su padre Marco Aurelio, con el que en algún momento llegó a compartir mandato.

Nada más subir al trono comenzó a dar muestras de su locura al ordenar que se lo adorase como la encarnación de Hércules y Mitra. También como sus antecesores, asesinó a su hermano, abuso y violó a sus hermanas y lo intento también con su propia madre.

Cómodo era amante de las batallas y le gustaba pelear con sus gladiadores aunque a éstos los obligaba a saltar a la arena con espadas de madera mientras que él iba armado hasta los dientes.

Obviamente sus adversarios sucumbían en la desigual pelea que repitió casi un millar de veces.

Como tal reencarnación de Hércules portaba en ocasiones la maza del héroe griego con la que asestaba golpes mortales a todo aquel lisiado o mendigo que encontrara tirado por las calles de Roma. A estos desmanes habría que sumar que Cómodo ofrecía a diario sacrificios humanos a la diosa Isis.

También como sus antecesores humilló a muchos de los senadores a los que pronto tuvo en contra. No faltarían tampoco los escándalos públicos gracias a las orgías que organizaban y de las que dejaba constancia escrita a través de las " Actas de Roma ", realizadas por sus escribas con el objetivo de ensalzar todos sus actos.

Gracias a estos documentos también hemos conocido su atracción por lo escatológico, pues llegó a mezclar en algún banquete ofrecido a sus amigos y familiares ricos manjares con excrementos y hasta sangre menstrual que los asistentes estaban obligados a ingerir sin mostrar repugnancia.

Tampoco la muerte de Cómodo fue muy agradable, acabó siendo víctima de una conspiración encabezada por la concubina del emperador, Marcia, que intentó acabar con su vida con un veneno que no resultaría suficiente para terminar con el  mandatario romano, por eso el resto de conspiradores participaron en el asesinato, principalmente y para mayor humillación del emperador, Narciso, un esclavo amante de su concubina que lo asfixió con su propio colchón.

Los restos del cruel emperador fueron arrojados a la fosa común (spolarium), donde se enterraban los cuerpos destrozados de los gladiadores caídos en el circo.

lunes, 3 de diciembre de 2012

Los Malos de la Historia: Nerón






Empezamos la semana con otro ilustre personaje.Nerón Claudio César Augusto Germánico (37-68 d.C.), fue emperador de Roma durante catorce años y aunque tuvo difícil superar en brutalidad a sus antecesores, también pasó a la historia por sus crueldades y por ser el responsable de las decapitaciones de San Pablo y San Pedro, los representantes de la nueva religión surgida para continuar con la palabra de Jesús de Nazaret y por perseguir a todos sus seguidores.

Aunque tuvo una infancia difícil, finalmente su madre Agripina consiguió que el emperador Claudio lo adoptase y, de esa forma ayudado por el ejercito pretoriano al que había comprado su madre, pudo conseguir el trono del Imperio Romano.

Nerón no era un hombre de Estado. Él prefería dedicarse en cuerpo y alma a la cultura y a otras artes como la poesía, el cante o el baile. Asumió gobernar el imperio con 17 años y al principio no dio muestras de crueldad en sus actos; al revés, parece ser incluso que le apenaba firmar sentencias de muerte. Pero el fallecimiento de su madre y el intento de conspiración  de su maestro, hicieron que cambiara radicalmente de comportamiento y que comenzara un periodo de auténtica locura ( hay que tener en cuenta que Nerón procedía  de la dinastía Julia-Claudia, la misma de sus antecesores sanguinarios y enfermos mentales, como Cayo Julio César, Octavio Augusto o Tiberio, por lo que algo llevaba en sus genes.).

Al morir su madre, Nerón mandó ejecutar a sus dos maestros, Burro y Séneca, y a un buen número de artistas y literatos. Acabó también con la vida de otro posible sucesor al trono por ser hijo de Claudio, Británico, suministrándole veneno. Para el emperador, libre de muchas de sus ataduras familiares y sociales, comenzó una nueva vida de excesos, juergas, bacanales y actos retorcidos como pedir a un amigo Petronio que se suicidase delante de él. Y así lo hizo, su amigo escritor hizo una fiesta y reunió a sus amistades y frente a Nerón y tras la orgía celebrada se abrió las venas frente a él.emperador.